Según analistas del sector, cerca del 40% de los clientes de telefonía móvil de los Estados Unidos están dispuestos a dejar de usar el dispositivo, o al menos a pasarse a un plan más barato como el prepago, dando de baja a servicios como Internet, mensajes de texto y correo electrónico.
De la encuesta publicada que realizó el New Millennium Research Council, muestra que ya hay un 15% del mercado que ya ha abaratado sus costes dejando de usar estas prestaciones adicionales.
El 19% directamente canceló sus líneas ante la pérdida del empleo, temor a despido u otras preocupaciones financieras.
Esta tendencia podría crecer en los próximos meses, y además repetirse en otros países, a menos que haya una manera de revertir la crisis.
Vía: El Mundo
Autor: Natalia