Vale que no es ético, ni políticamente correcto, pero no por ello menos cierto. Imagino que a poco que os animéis en los comentarios podremos encontrar cientos de usos para esta aplicación pero a priori, la cosa no da para mas. Veamos en profundidad que hace File Destructor 2.0.
Para empezar le damos un nombre al archivo resultante, por ejemplo "trabajo para clase importantísimo". Nótese que se debe hacer hincapié en la seriedad y trascendencia de dicho archivo. A continuación elegimos el tamaño que debería tener, desde pocos megas para un Doc, algo más para Ppt o incluso cientos para un Zip. Para concluir añadimos la extensión deseada, importante de nuevo que se encuentre en correlación con el supuesto contenido.
Ya solo debemos pulsar sobre "Destruir y guardar archivo", que nos lanzará la descarga del elemento deseado. Así conseguiremos un abultado archivo sin funcionalidad alguna ¿Que mejor excusa en estos tiempos llenos de virus y con un Windows Vista al que culpar de tamaños errores? Como recomendación nuestra, no le deis malos usos :)
Vía: Microsiervos
Enlace: File Destructor
Autor: Manuel Rodríguez
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